Si hay una virgen en Córdoba a la que l@s creyentes le tienen devoción (al menos el viernes de dolores) es a la virgen del mismo nombre.
Por eso, cuando el diario CÓRDOBA empezó, la semana pasada, con la publicidad de que pondrán a la venta el próximo viernes dolorido, junto con el diario, una pulsera de la virgen de los dolores, tod@s los que nos dedicamos a la venta de prensa, pensamos que había sido un acierto y que ayudaría a subir las ventas de manera sustancial.
La publicidad, las fotos de la pulsera, todo hacía presagiar un éxito de ventas sin precedentes.
En todos los kioskos y locales, se confeccionaban listas de clientes interesados en el amuleto, pues las expectativas, desbordaban los cálculos más optimistas.
El lunes, empezaron a llegar noticias preocupantes: como mucho, recibiríamos un 12% de pulseras respecto al servicio de periódicos, lo que motivó el consiguiente cabreo de l@s vendedores de prensa y el de l@s acólitos de la imagen, que veían cómo en el kiosko le decían que no podían asegurarles que hubiera pulseras para todos.
Hubo desmayos, camisas rasgadas, golpes de pecho,crujir de dientes y llorar de ojos.
Hubo crisis de fé y colas en el obispado para apostatar.
Hasta hoy.
Hoy hemos recibido el preciado fetiche.
La cantidad, es la que nos temíamos.
Pero, lo que no nos podíamos imaginar era el milagro que se había obrado con la publicidad, pues hay que tener verdadera imaginación para encontrarle parecido con la fotografia de la publicidad, a la pulsera que hemos recibido.
Ya he tenido tres deserciones entre los apuntados a la lista, y varios más los que, a la vista de la "imagen", han desistido, sin llegar a apuntarse.
Se rumorea que han contratado a un tal Murphy, lo que no he entendido bien es si trabaja en el periódico, en la fábrica de pulseras, o está pluriempleado.